
El informe forense realizado al hombre que falleció tras ser reducido por un agente de la Policía Municipal concluye que la causa de la muerte fue una anoxia, es decir, la falta total de oxígeno. Este dato ya fue señalado por los sanitarios que atendieron a la víctima durante más de media hora en el lugar de los hechos.
La investigación, que se encuentra en fase preliminar, está siendo dirigida por el Juzgado de Instrucción número 4, cuya jueza ha solicitado tanto las grabaciones de las cámaras de seguridad de la calle como las imágenes captadas por testigos del suceso.
Desarrollo de los hechos en la calle
El suceso tuvo lugar en torno a la noche, cuando dos agentes de paisano de la Policía Municipal fueron sorprendidos por dos hombres que intentaron robarles el teléfono móvil. Ambos agentes salieron corriendo tras los sospechosos.
Uno de los policías logró alcanzar a uno de los presuntos asaltantes e inmovilizarlo en el suelo con una técnica de control, a la espera de refuerzos. Minutos después, agentes de la Policía Nacional llegaron al lugar, esposaron al detenido y detectaron que se encontraba en estado de semiinconsciencia.
Intentos de reanimación fallidos
Poco después, una patrulla de la Policía Local se personó en el lugar e intentó reanimar al detenido con un desfibrilador, al comprobar que estaba en parada cardiorrespiratoria. También llegaron sanitarios que aplicaron maniobras de reanimación durante unos 30 minutos, aunque finalmente se confirmó el fallecimiento.
El informe forense realizado en el lugar del levantamiento del cadáver ya apuntaba a una muerte por anoxia, provocada por asfixia o ahogamiento, y esa misma conclusión se ha reflejado en la autopsia preliminar.
Investigación en curso
La Brigada de Policía Científica y el Grupo V de Homicidios de la Policía Nacional se han hecho cargo de la investigación. El fallecido, según fuentes policiales, era un delincuente habitual, con antecedentes por robos y peleas, y considerado un hombre conflictivo en la zona.
La investigación sigue abierta a la espera de nuevas pruebas que determinen si hubo uso excesivo de la fuerza en la inmovilización o si se actuó conforme a los protocolos policiales.
